La percepción de los colores en el aura «Gold Angel» Copyright Cheryl Yambrash Rose Existen diversas formas de poder visualizar el aura en las sesiones terapéuticas. El aura se puede percibir como capas de colores en movimiento que bordean el cuerpo, que se extienden y se desvanecen dentro del campo energético. Cuando se empieza a leer las auras, es muy factible que no se comprenda inmediatamente el significado de los colores. Sin embargo hay personas que son muy sensibles a este fenómeno y pueden percibirlas con los ojos abiertos o a través del desarrollo de la clarividencia en el chacra del tercer ojo. Mediante la práctica se logrará aclarar el significado de cada color. Para adentrarnos en el tema expondremos una breve introducción respecto a la terapia alternativa que se encarga del estudio de las influencias de los colores sobre el cuerpo humano: la cromoterapia La cromoterapia nos enseña a utilizar la proyección de luz de diversos colores sobre el cuerpo humano, los cuales provocan diferentes reacciones sobre éste como: activación de chacras, relajación de una zona afectada, desbloqueo energético, etc. Los colores influyen en nuestro campo energético y provocan sensaciones de agrado o de rechazo ya que estimulan los impulsos nerviosos creando una respuesta a las radiaciones invisibles de dichos colores. Por ejemplo, las personas irradian colores brillantes cuando se encuentran afectadas por sentimientos o acciones determinadas. Cuando una persona se encuentra tranquila su campo aural vuelve a su estado normal o estable. En general este estado se puede percibir como una capa palpitante de color púrpura azulado oscuro o transparente que sobresale desde 6 mm a 3,75 cm de la epidermis que palpita a razón de 15 pulsaciones por minuto. Estas pulsaciones son movimientos ondulantes que fluyen hacia debajo de los brazos, las piernas y el torso. Primeramente está rodeada por una capa nebulosa de color azul claro a gris que es mucho más brillante cerca del cuerpo y que se va desvaneciendo a medida que se aleja de éste. El color azul se torna amarillento alrededor de la cabeza hasta una distancia de 7,5 a 10 cm. En general se percibe luminosidades de color azul claro surgiendo de las puntas de los dedos de las manos, de los pies y de la parte superior de la cabeza. Cada pensamiento, sentimiento y experiencia de una persona tiene efectos sobre el aura y la cambia. Algunos de estos efectos se mantienen para siempre. Veamos un ejemplo de cómo las auras de diferentes personas actúan entre sí. Se observó el aura de un hombre dando un recital frente a su público. Las conclusiones fueron las siguiente cuando canta el aura se expande y brilla. A medida que el público pone más atención, su aura general se expande. Grandes arcos de .luz se expanden desde el cantante hacia el público y las auras de ambos se conectan. Cuando fluyen los sentimientos entre el intérprete y el público empiezan a crearse formas mutuas. Estas formas energéticamente conscientes se van relacionando en estructura y color con los pensamientos y sentimientos mutuos del grupo y de la música que está creando. Al concluir la canción, estas formas se desconectan y se disgregan a causa de los aplausos que actúan como si fueran una goma de borrar que limpia el campo para la siguiente creación musical. Tanto el intérprete como el público se activan al recibir la energía creada por la música. Una parte de la energía se internalizará para romper los bloques energéticos mantenidos en el cuerpo y otra parte se utilizará para la siguiente creación. Curación del campo energético mediante el color y el sonido Existen ocasiones donde el sanador deberá retener un color determinado que esté siendo canalizado a través de sí mismo. Retener el color significa mantener el propio campo energético en gama determinada de frecuencia durante toda la sesión de curación. Se necesita práctica para aprender a producir el color elegido para la curación. Es importante aprender a manejar la modulación cromática antes de que se intente trabajan con un color determinado sobre el campo energético. La mayor parte de la «quelación» se realiza sin control del color. La quelación es el método por el cual aprendemos a cargar y despejar el aura del paciente. Esta técnica fue creada por la reverenda Rosalyn Bruyere, que adoptó dicho término para referirse a la limpieza del campo del paciente mediante la separación de los residuos aurales. La quelación a su vez llena el aura de energía y por lo general la equilibra. Esto se logra haciendo correr la energía por el cuerpo del paciente de manera gradual, empezando por los pies. De este modo la energía fluye a través del cuerpo en sentido ascendente dcsde los pies. De este modo es posible verter energía al sistema enérgetico agotado. Éste la absorve y la transporta donde sea necesario. Es necesario tener en cuenta que si empezamos a proyectar energía sobre la zona afectada de manera directa, es probable que suceda que el cuerpo energético conduzca la energía a otro emplazamiento antes de que comience a nutrir realmente la zona de entrada. Al no ser un flujo energético natural, carece de eficacia. Cuando apoye las manos sobre los pies del paciente, proyecte energía hasta que despeje y equilibre su campo energético. No intente controlar el color que está canalizando, deje que este fluya de manera automática. Si se centra en un color probablemente esto interfiera en el proceso en vez de ayudar, ya que los campos disponen de mayores opciones que su mente lineal. Cuando relizamos este proceso lo que estamos buscando es que se despejen los chacras de tal modo que éstos puedan metabolizar todos los colores del campo energético universal. El campo del paciente absorberá lo que necesite. Si uno de los chacras queda bloqueado, tendrá dificultades para canalizar la energía a través de él. Este tema lo expondremos con mayor amplitud en el capítulo que verse sobre «Curación del espectro total». Lo que debemos aprender es mantener nuestro campo energético en un color determinado. No es cuestión de pensar en un color como algo que uno puede visualizar y nada más, sino que significa «estar» en un determinado color. Los sanadores loo denominan «hacerlo amarillo» porque cuando se piensa se hace amarillo. Por lo tanto para hacerlo azul, usted debe estar en azul, cualquiera que sea el significado que esto tenga para usted. En otra palabras, lo que necesita es experimentar por sí mismo la sensación que produce hallarse en un estado de «azul». Este método se logra mediante estados meditativos constantes. El poder sentir sensaciones de calor o frío, aromas y sonidos en nuestras meditaciones, es algo maravilloso que se puede lograr mediante la práctica contínua de éstos. Existen diversas formas para aprender a controlar el color que se envía en una sesión de curación. Aquí expondremos una de las formas más sencillas. Hágase las siguientes pregunta ¿Qué sensación siente usted cuando lleva ropa azul o cuando se encuentra situado en un lugar bajo la luz de este color? ¿Qué significa el azul para usted? ¿De qué manera usted recibe mejor la información respecto a la dolencia del `paciente: por la vista, por el oído o por el tacto?. Recuerde que cada uno tiene su propia manera de captar la información de acuerdo al desarrollo de sus dones. ¿Qué sensación le produce ver, oír o palpar el azul?. Hágalo con un cristal mineral en bruto que usted pueda colgar de una ventana. Toque con los dedos uno a uno los colores del arcoiris que produce. Qué sensación le produce cada uno de ellos? Tome unos materiales de colores o trozos de papel de diversos colores, del mismo tamaño. Mézclelos entre sí, cierre los ojos y luego escoja uno . Mantenga los ojos cerrados mientras analiza las sensaciones que le producen ese color en sus manos. ¿Qué tacto tiene?, ¿le gusta o no? ¿provoca en usted alguna sensación? ¿cuál? ¿le infunde energía o todo lo contrario? ¿lo hace sentir bien o mal?. Póngaselo en diferentes partes del cuerpo. Pregúntese si le gustaría ir vestido de ese color. A continuación (con los ojos cerrados) decida qué color le gusta más. Ahora abra los ojos. Se quedará sorprendido de la información que recabó de cada color y de su relación con cada uno de ellos. Llame a otra persona y toménse de las manos. Comiencen a pasarse entre sí la energía de un color determinado. Compruebe si esa persona es capaz de dilucidar de que color se trata. Practique este ejercicio contínuamente. Recuerde que si desea pasar el color rojo, el primer paso es despejar su primer chacra. Si desea pasar el naranja debe tener su segundo chacra despejado y así sucesivamente. Recuerde que antes de realizar este ejercicio debe tener todos sus chacras despejados. El significado del color en el aura Generalmente cuando uno aprende a «leer» el aura de un paciente, la persona tiende a preguntarno ¿Qué significa ese color?. En realidad la respuesta sería: ¿En qué capa del aura?. O quizás uno puede expresarle en un sentido general los colores que predominan en los niveles no estructurados. La siguiente es una clasificación del significado de los colores a nivel del alma que da Pat de Vitalis. Antes diremos que para leer los colores del nivel del alma, relice una meditación profunda y seguidamente pida que le muestren los colores de dicho nivel. Mediante la práctica de esta técnica, los colores aparecerán en su pantalla mental, lugar donde usted puede desarrollar sus visualizaciones.. Los colores se pueden presentar en dicha pantalla con diversas formas o figuras, que podrá describir al paciente para ayudarlo a comprender lo que usted le quiere transmitir, respecto al significado de cada color. Clasificación del color a nivel del alma Color Rojo: Si ve este color, esto quiere decir, pasión o sentimientos fuertes. Si está mezclado con rosa significa, amor. El rojo claro significa ira libre o expresada. El rojo oscuro es ira retenida. El naranja rojizo es pasión sexual. Naranja: cuando presenta este color significa que la persona tiene ambición. Amarillo: significa, intelecto. Verde: La persona que manifiesta abundante color verde tiene muchísima energía curadora o nutriente. Azul: es el color del maestro y de la sensibilidad. Púrpura: cuando se ve de este color, la persona tiene una conexión muy profunda con el espíritu, Ïndigo: es avanzar a dicha conexión espiritual. Lavanda: se refiere al espíritu. Blanco: a la verdad. Dorado: es la conexión con Dios y el servicio a la humanidad con amor divino. Plateado: este color a nivel del alma significa que la persona está conectada o tiene el don de la comunicación y que es capaz de comunicarse bien. Negro aterciopelado: es como las puertas de acceso a otras realidades. Marrón: significa que uno está avanzando en sus tareas. Negro: ausencia de l.uz o profundo olvido. A nivel del alma se lo toma como sentimientos de ambición desmedida. El color en una sesión de curación En una sesión terapéutica se utilizan todos los colores del arcoiris. Cada color tiene su propia influencia en el campo energético humano. Según Bárbara Ann Brennan los colores se utilizan en una terapia de curación con el siguiente fin: El color rojo se emplea para cargar el campo, quemar el cáncer y calentar las zonas frías. El naranja se utiliza para cargar el campo, aumentar la potencia sexual y la inmunidad. El amarillo se utiliza para despejar la mente cuando está embotada y facilitar el desarrollo del pensamiento lineal. El verde se emplea como un buen equilibrador general y curador de todas las cosas. El azul enfría y calma. Se utiliza para reestructurar el campo etéreo. El púrpura ayuda al paciente a conectarse con su espíritu El añil ayuda a abrir el tercer ojo, mejora la visualización y aclara la mente. El blanco se emplea para cargar el campo energético. Aporta paz, serenidad y ayuda a desterrar el dolor. La misión del dorado es reestructurar la séptima capa aural, reforzar y cargar el campo. El negro aterciopelado devuelve al paciente a un estado de gracia, silencio y paz con Dios. Es apropiado para reestructurar los huesos que han quedado desmenuzados por el cáncer u otros traumatismos. El azul purpúreo aleja el dolor cuando se establece en tejidos profundos y en las células óseas. También ayuda al paciente a conectarse con su tarea. El sonido en la curación Ahora expondremos lo que opina Bárbara Ann Brennan respecto a como utiliza el sonido en sus sesiones de curación. «Aplico el sonido en forma directa sobre los chacras para cargarlos y reforzarlos. Me sitúo con la boca a unos 2 cm y medio del cuerpo, especificamente donde se encuentran los chacras. Cada uno de éstos tiene una frecuencia de sonido distinta, y la de cada persona es ligeramente distinta para cada chacra. Para hallar la frecuencia aplicable a cada chacra voy variandola poco a poco hasta que doy con una resonancia. El paciente puede oirla y sentirla y como yo puedo ver el campo, observo como el chacra responde al sonido. Cuando alcanzo la frecuencia apropiada el chacra se tensa y empieza a girar rápidamente. Al mismo tiempo abrillanta su color. Después de retener el sonido durante cierto tiempo el chacra queda lo bastante recargado como para retener su nivel de energía. Seguidamente paso al segundo chacra hasta llegar al séptimo chacra. Un efecto interesante de este trabajo es que el enfermo aumenta la capacidad de poder visualizar. Si una persona tiene un chacra lo insuficientemente cargado es muy probable que tenga dificultades para visualizar el color que necesita en su mente. Sin embargo con unos minutos de terapia de curación a través del sonido, el paciente logra visualizar el color del chacra. Este mismo tratamiento da resultado para tratar los huesos y los órganos del cuerpo. Llevo el sonido a un órgano determinado poniendo la boca a 2 cm y medio de distancia del cuerpo. El efecto que produce el sonido en dicha zona puede ser flujo energético, limpieza del órgano o reforzamiento del órgano. Me limito a observar la respuesta y a seguirla. Este tipo de trabajo sónico da resultado para curar discos invertebrales dañados, para mejorar el crecimiento tisular, limpiar fluídos estancados en el cuerpoy poner a punto el sistema nervioso. Además de emitir sonido en forma de tonos, se puede hacer distintos tipos de sonidos. Algunos temas musicales estan destinados abrir los chacras en una serie progresiva, empezando por el primero hasta el séptimo, de tal manera que actúan como flujos energéticos que ayudan a abrir y cargar los vórtices energéticos o chacras. La música es muy curativa. Ir a Función psicológica de los chakras Ir al Indice de Consultorio Energético
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